Si bien muchos las llaman simplemente putas, la verdad es que una escorts en Barcelona hace mucho, mucho más. El cliente de una escorts busca la satisfacción sexual, por supuesto, pero también la conversación, pasar un rato agradable, la diversión y, naturalmente, el calor humano.
Tradicionalmente se piensa que una puta es solo para pasar el rato con el único fin de encontrar satisfacción sexual. Muchas mujeres piensan que su pareja, si es hombre, jamás ha pisado un club de alterne pero lo cierto es que ni las putas son solo putas, ni solo se dedican a dar satisfacción sexual. De ahí nace la figura de las escorts. Mujeres dedicadas `profesionalmente al sexo y a ir mucho más allá.
Hace años se publicó un estudio en el que se ponía de relieve el alto número de hombres que en algún momento de su vida habían buscado escorts de un modo u otro, nada más y nada menos que el 69% de los varones estadounidenses, de los cuales la mayoría estaban casados, con estudios superiores y ganaban un salario anual muy por encima de la media.
Si tantos hombres buscan una y otra vez pasar la noche o el fin de semana con las escorts de la zona es que debe ser un servicio mucho más completo que la simple práctica de sexo, no tan difícil de encontrar hoy en día en cualquier discoteca o en la zona roja de la ciudad.
Lo cierto es que las estadística revelan que los hombres de todas las razas, edades y contextos sociales practican sexo con putas, y muchos demandan más de ellas, demandan su compañía, su conversación, su rato de ocio y diversión tomando copas. Y es que comenzar el fin de semana en la compañía de una chica escultural y simpática, es otra cosa.
Las escorts se han convertido par muchos hombres en la pareja perfecta, pues engloba una serie de factores importantes para salir por la noche en Barcelona, pasarlo bien y terminar aún mejor. La variedad de chicas dedicadas a esta profesión es muy amplia, podemos encontrar en la web escorts en Barcelona de cualquier nacionalidad. Es indiferente si son de un país u otro porque en definitiva lo que viene a ofrecer es lo mismo: compañía muy agradable, por su cuerpo de escándalo, conversación divertida, seducción y sexo con una profesional hasta el amanecer.
Escorts vs. Putas
Muchos pensarán que es lo mismo, pero la verdad es que no. Su dedicación es la práctica de sexo por dinero, sin embargo, la escorts está dispuesta a ofrecer más, pues cuida de su físico y pone mucha atención en su forma de vestir según acompañe en una situación u otra, si, por ejemplo, es una escort universitaria, tendrá un nivel de conversación que pueda resultar interesante para algunos clientes o circunstancias, y está acostumbrada a salir con diferentes hombres a disfrutar del ocio nocturno en Barcelona y hacer que se lo pasen muy bien.
Podemos decir, que entre las escorts y las putas el fin es el mismo pero el camino es muy diferente.
La fantasía de las escorts
Entre los clientes de una escort de lujo hay de todo, pero muchos de ellos, no contentos con la operación sexo por dinero en Barcelona disfrutan imaginando que la relación no se da por dinero sino por atracción, simpatía, chispa entre la escort y el hombre, seducción, etc.
Las chicas de compañía hacen esa fantasía realidad dado que salen con su cliente a tomar copas o a cenar en un agradable restaurante, al mismo donde acuden parejas enamoradas y mantienen conversaciones íntimas antes de irse a la cama a practicar sexo, después se dirigen a una discoteca a bailar y a disfrutar como cualquier otra pareja y por último acaban desnudándose apresuradamente para disfrutar uno del cuerpo del otro.
Resumiendo, las escorts hacen realidad la fantasía masculina de una relación bonita, con complicidad y buen sexo al final de una noche de diversión en los bares. La pelea, los celos, el aburrimiento o la rutina en la cama, no son piezas de este puzzle, quizá sea eso lo que hace que las escorts tengan una larga lista de hombres deseando salir con ellas y pasarlo bien, además, por supuesto, de culminar la velada con sexo salvaje y todo lo guarro y caliente que sea posible.
La psicología de las escorts
Un alto porcentaje de hombres usuarios de la prostitución confiesa acudir a su chica para hablar con ella y desahogarse y no solo para follar. El número de clientes que repiten con su querida puta porque ésta los escucha y da cariño por medio de su compañía, caricias y escucha es muy alto, con lo cual el factor de apoyo psicológico al cliente también es un rasgo muy destacado de las mujeres que se dedican a la prostitución.
No son realmente amigas de los clientes, tampoco sus novias ni sus amantes, pero entre muchos de estos dúos que comienzan con una transacción económica nace un vínculo potente que no solo es sexual sino mucho más profundo.
Las chicas de escorts en Barcelona aseguran que los clientes que solo quieren sexo son muchos menos que aquellos que buscan la conversación, la compañía y la opinión de éstas, dado que son mujeres de amplia experiencia, mucha psicología y con un conocimiento de la mente masculina muy superior al de cualquier otra mujer que no se dedique a lo mismo.
La eterna profesión
Por todos los motivos señalados y por muchos más, las escorts han ido aumentando de número y tienen sus agendas llenas de citas con hombres deseosos de pasarlo bien sexualmente pero también de charla, diversión, confianza e incluso calor humano.
Si le preguntamos a un cliente habitual de las escorts de Barcelona cómo se podría acabar con la prostitución, él diría que solo se acabaría si no hubiesen chicas en la tierra.